Antes de escribir mi opinión, he querido leer algunas criticas escritas, observo que muchas de las redactadas por críticos que escriben en los medios tachan de maniqueísmo, excesivo tremendismo, manipuladora y teatral.
En el lado de las opiniones de los espectadores leo que han sido embargados de emoción y de sentimientos conmovedores.
He querido situar la novela de Dulce Chacón, la cual ha sido el origen de esta película, la autora nació en Zafra, la ciudad fue tomada por los sublevados, unas doscientas cincuenta personas fueron asesinadas por las nuevas autoridades. La localidad tenía 7000 habitantes.
Chacón tardó cuatro años en escribir la novela. En ella, Dulce Chacón continuó abordando los difíciles años de la posguerra, novelando los testimonios, recogidos en entrevistas por toda España, de mujeres víctimas de la represión franquista durante los años cuarenta.
Tachar de maniqueísmo, tremendismo, manipuladora y teatral, es tanto como querer ignorar la historia, y con ello retrasar la reconciliación real, hemos oído la voz de los vencedores durante muchos años, es momento de oír la voz de los vencidos.
Esa desgraciada época de la guerra y de la posguerra, se escribe en pequeños capítulos, los que han vivido las personas de un bando y del otro, matándose sin querer matarse en muchos casos, odiándose en el mismo idioma, y llenando las fosas de personas inocentes.
No debería de haber ocurrido, pero después de que ha ocurrido debemos de recordarlo para evitar que vuelva a suceder.
La historia que narra esta película es estremecedora, el silencio contenido en la sala que a duras penas el espectador puede aguantar la emoción y con ellas las lagrimas.
Inma Cuesta y María León, las dos protagonistas indiscutibles de la obra, la primera nos impregna de ese espíritu y coraje que tiene toda madre que sufre por su hija recién nacida, manteniendo la dignidad y sus ideales.
Maria León sin duda es la encarnación de la dulzura, la inocencia, la pureza, lucha por su hermana, por su sobrina, su lucha es por amor, su interpretación es de lujo.
Un último recuerdo para Dulce Chacón, murió sin ver la película, a los 49 años de edad un cáncer se la llevo, en la web de la película encontraras “La historia de cómo empezó esta aventura por Benito Zambrano. Director y Guionista”, merece la pena leerlo.