Emilio Zola – La bestia humana
SINOPSIS:
El subjefe de la estación de El Havre, Roubaud, empleado modelo, casado con Séverine que es huérfana de padre desde la infancia y fue apadrinada por Grandmorin, presidente de la compañía de ferrocarriles, quien facilitó a Roubaud conseguir su empleo se entera de que su esposa guarda en secreto su infancia, al conocerlo despierta en él una rabia que cambiara sus vidas y las de otras personas con quien se relaciona.
Émile Édouard Charles Antoine Zola (París, 2 de abril de 1840-ibídem, 29 de septiembre de 1902) fue un escritor francés, considerado el padre y el mayor representante del naturalismo. Tuvo un papel muy relevante en la revisión del proceso de Alfred Dreyfus, que le costó el exilio de su país.
«La verdad está en camino y nadie la detendrá»
RESEÑA:
En esta obra se ven reflejados los instintos animales que están incrustados en la genética humana: Celos, pasión, posesión, envidia, mentira…
Roubaud descubre el pasado de su esposa Séverine, que había sido violentada por su padrino Grandmorin, ello desata los celos del esposo llevándole ciegamente a querer salvar su honor de la única forma que sabia: matando. Esta situación la describe Zola maravillosamente, adentrándonos en las pasiones mas ciegas de la condición humana.
Ademas Séverine inicia una relación con Jacques Lantier, maquinista de locomotoras; Jacques padece una enfermedad psicológica que bien podría ser esquizofrenia, lo cual nos lleva a una historia que movida por las pasiones, añade a ellas un componente de locura que hace de la novela un tratado de psicología.
A pesar de la fuerza de los personajes descritos, existen otros con tanta fuerza como los principales: Flora, enamorada desde la infancia de Jacques, con una personalidad que impregna de misterio toda la obra; Los padres de Flora que su propia vida merecerían una novela para si mismos.
Un libro que no deja a nadie indiferente.
Considero que he tenido la suerte de poder leer esta obra en la edición de 1953, traducida por Clara Campoamor.