Gabriel García Márquez – Cien años de soledad
SINOPSIS:
José Arcadio Buendía y su esposa, Úrsula, son los procreadores de José Arcadio Buendía, el hijo mayor, y Aureliano Buendía, que más tarde sería coronel y Amaranta, la menor; de estos tres nacerán cuatro generaciones que, de manera cíclica como la historia, se irán relacionando y procreando entre ellos mismos, salvo algunas excepciones. Ésta familia acompañada por otros esposos, mujeres y niños, cruzan la sierra y en un lugar desierto encallado en el caribe fundan el pueblo de Macondo; el pueblo es testigo de la felicidad, de la tristeza, de la fortuna y de la desdicha en donde dignamente, durante mas de cien años, vivieron los Buendía.
MI COMENTARIO:
La muerte reciente de Gabriel García Márquez, ha hecho que el público agote las existencias de este libro, considerado uno de los cien mejores en lengua Española, para mi releer esta obra me ha llenado de gozo y me permite volver a admirar al escritor y a su obra.
Cien años de soledad relata el origen, la evolución y la ruina de Macondo, una aldea imaginaria, y la historia de la estirpe de los Buendía que se extiende por más de cien años, y cuenta con seis generaciones para hacerlo.
La imaginación convertida en genialidad, es capaz de condensar en pocas paginas, varias generaciones de individuos con todas sus historias pequeñas y grandes, una verdadera obra de arte, de imaginación y de estilo literario.
La soledad, tema principal en toda la obra, aspecto que tanta gente teme y huye de ella, y no hay nada mas cierto que hemos de convivir con ella: «El coronel Aureliano Buendía apenas sí comprendió que el secreto de una buena vejez no es otra cosa que un pacto honrado con la soledad».
Otros aspectos como el incesto las enfermedades mentales, así como referencias religiosas, son temas tocados en el libro en una sociedad rural en que todo esto es vivido muy diferente que en otras comunidades.
Este libro junto con otros como Don Quijote de la Mancha, son joyas que deberían ser releídas varias veces a lo largo de una vida.
Barcelona a 30 de abril de 2014